Esta camiseta del United (1990), con un patrón bastante empalagoso en toda la superficie de tela, es una de las camisetas más feas de la historia ‘red devil’. Aún a riesgo de que no gustasen compró cincuenta unidades y se las trajo, entregándole al Athletic de Bilbao 25 de ellas y la otra mitad las dejó guardadas en casa de sus abuelos, ya que las camisetas de la sucursal madrileña todavía estaban en buen uso y tampoco sabía si las querrían.